jueves, 4 de abril de 2013

Un amor de verano - Capítulo 12


Capítulo 12


Narra Blas:

A la mañana siguiente me desperté muy feliz acordándome de la noche tan  maravillosa que había pasado con María.

De repente me acordé de Ane y de que hoy tenía que decírselo. La escribí un mensaje para quedar dentro de media hora en la cafetería de la plaza.

Me vestí y me dirigí allí, mientras iba pensando en cómo iba a decírselo. Antes de entrar mande un mensaje a María diciéndola: “Buenos días princesa, ya te echo de menos, estoy a punto de contárselo. Te amo pequeña.”

Entré a la cafetería y allí estaba Ane sentada. Llegue hasta ella e intento besarme pero yo aparte la cara.

        -          Hola Ane.
        -          Hola Blas, ¿ya has decidido?
        -          Si ya lo tengo decidido.
        -          Y bien, ¿a quién has elegido?
        -          La elegido a María.
        -          ¿¡QUÉ!?
        -          Si, la quiero, la amo y quiero estar con ella.
        -          Pero ¿y nosotros?
        -          Lo siento Ane, siento hacerte daño, pero lo que siento por ella es amor y lo que siento hacia ti era cariño y no puedo estar mintiéndome a mí mismo ni a ti, no sería justo. Lo siento.
        -          ¿Sabes que con ella no tienes futuro?, ella no es nada comparada conmigo.
        -          Para mi ella es perfecta, además la elegido también por otras dos razones más.
        -          ¿Así? ¿cuáles?
        -          Ella ha sido siempre mi mejor amiga y nunca me ha pedido que escogiera entre tú y ella por muy mal que la caigas. Y la otra no soporto que me mientan solo porque estén celosas.
        -          Blas, yo…
        -          Lo siento, Ane, en serio, pero hasta aquí ya llegado lo nuestro.

Cogí y me levanté de la mesa y salí fuera. Me encontraba muy feliz y agusto me había quitado un peso de encima. Y ya no sentía esa culpa por dentro.

Me dirigí a casa de María para contarle que por fin podríamos estar juntos.

Narra María:

Me desperté gracias a mi móvil, quien habrá sido el listo que me ha despertado. Abrí el móvil y había un mensaje, era de Blas. Enseguida se me quito el enfado y lo leí en él ponía: “Buenos días princesa, ya te echo de menos, estoy a punto de contárselo. Te amo pequeña.” Cuando leí el mensaje se me dibujo una sonrisa. Que mono era. Y por fin iba a hablar con Ane.

Me levanté, me vestí y baje a desayunar. Había dormido muy bien, claro había soñado con Blas ja, ja, ja.
De repente alguien tocó el timbre y fui a abrir la puerta. Allí estaba Blas, más guapo que nunca, bueno siempre lo estaba.

        -          Buenos días princesa.
        -          Buenos días chiquitín.
        -          Ya está todo arreglado, por fin podremos estar juntos.
        -          ¿En serio?
        -          En serio.

Corrí hacía él y le bese como si no hubiera mañana. Por fin, por fin íbamos a estar juntos.

        -          Te amo princesa.
        -          Yo también te amo.

Nos volvimos a besar y nos quedamos allí abrazados.

Lo que no sabíamos es que había alguien observándonos, planeando su venganza.

5 comentarios:

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  2. Haber, que a Ane le den por el culo y que no haga venganza, que sí no voy y le pego e.e
    SIGUIENTE :)

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    1. Jajajaja quien sabe esta mujer es capaz de hacer de todo jaja

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  3. ¡Qué interesante se está poniendo! Creo que ya sé lo que va a pasar en el siguiente capítulo. Hoy lo leo sin falta.

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    1. Jajaja me alegro de que te guste. No seas adivina sino no tiene gracia jajaja

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